Es costumbre en Alemania que cada uno pague sólo lo que ha pedido.
Se hace así, en parte, porque aquí se piden normalmente platos individuales, no hay tanta costumbre de compartir ensaladas, raciones o postres. Se suele pedir plato único que ya viene con guarnición, bien de ensalada o mas habitualmente, de patatas fritas ("pommes").
Por eso aquí es más fácil que cada uno pague lo suyo de lo que seria, por ejemplo, es España. Si pides una de calamares, no vas a contar cuantos calamares comió cada uno y dividir a ver a cuánto toca.
En todos los restaurantes te lo preguntan a la hora de pagar "zusammen oder getrennt?", que quiere decir "¿todo junto o por separado?". Si dices "getrennt", el camarero irá uno a uno, preguntando qué ha tomado, haciendo las sumas parciales y cobrando uno a uno. Si dices que zusammen, pues nada, se paga todo junto. En algunos sitios te lo preguntan incluso antes de pedir, para ir preparando varias notas, con lo que se ahorra tiempo a la hora de pagar.
Cuando se pide algo compartido, como una botella de agua o de vino, uno la paga entera y los demás contribuyen con un euro o dos, dependiendo del precio, en metálico.
Eso para restaurantes, con las cervezas de antes o después de la cena, es más normal pagar rondas y no llevar la cuenta al detalle.
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